Ana Riveros, según trascendió, habría sufrido un ataque de histeria al verse enfrentada a uno de los inculpados (Sagredo), levantándose de su asiento y gritándole: “Tú fuiste, tú fuiste,…” al tiempo que intentó golpearle con sus puños.
La Tercera, Miércoles 10 de marzo de 1982